Las Cristas de Galo son un pastel conventual elaborado de forma artesanal típico de la ciudad de Vila Real, cuya forma es exactamente la de una cresta de gallo. La masa se rellena con un duIce a base de almendra y huevos. Después de cocidos en el homo se espolvorean con azúcar. Los pasteles de tocino, también conocidos como pasteles de Vila Real y, más recientemente por crestas o crestas de gallo, son una creación de las monjas del Convento de Nuestra Señora del Amparo, de la Orden de Santa Clara y ciertamente una de las especialidades mas representativas de la dulcería conventual vila-realense. Desde 2019, han sido reconocidas como una de las 7 Maravillas Dulces de Portugal.